Desafío
La fachada del biorreactor abarca un área de 200 m2 y constituye la esencia del sistema de energía.Está compuesta por tanques de vidrio de 2.6 m de altura por 70 cm de ancho y aproximadamente 2 cm de profundidad, con capacidad para aproximadamente 24 litros.Los tanques se llenan con una solución de cultivo enriquecida con sales nutrientes, lo que le brinda a las microalgas condiciones óptimas para el crecimiento.El aire comprimido garantiza que las algas siempre estén en movimiento y que el CO2 se introduzca de manera continua en el reactor para propiciar un mejor crecimiento.Una caldera de gas proporciona el CO2.La luz solar que las algas no usan también calienta el líquido del reactor.Al igual que con un sistema de energía solar, este calor se separa, se introduce en una unidad de energía y se usa para calentar el edificio.
El Dr. Martin Kerner, director de SSC Strategic Science Consult GmbH, comenta:“El mayor desafío de este proyecto pionero fue combinar la tecnología innovadora usada para cultivar algas con tecnologías de construcción modernas.Esa fue la única manera de sustentar las diferentes funciones de la fachada de microalgas, tales como el calentamiento y la producción de biomasa, además de garantizar la insonorización y la protección lumínica para el edificio.Hemos logrado esto con “La casa de las algas”, que es la primera de su tipo en todo el mundo”.