Al pasar al nuevo departamento de ventas, tuve la oportunidad de encargarme de algunas cuentas y de profundizar la relación con esos clientes. El cambio no fue fácil, pero mis compañeros me hicieron la transición tan fácil como fue posible.
Mi equipo apoya constantemente mi aprendizaje y me ayuda de todas las maneras posibles para que desarrolle mis habilidades. Trabajamos juntos en estrategias para los clientes y debatimos hasta dar con las mejores soluciones para ellos.
Una de las cosas que más agradezco y valoro de Rockwell Automation son los debates abiertos y la cultura de feedback con la que trabajan, y que nos permite conseguir grandes resultados. Además, todos los compañeros están siempre dispuestos a emplear parte de su jornada en ayudarte a progresar y a alcanzar tus objetivos.
Como es natural, también resulta de mucha ayuda el hecho de haber practicado durante mi programa de formación. Pasé tres meses en Bruselas formándome. Y durante ese tiempo hubo clases y talleres, pero lo más importante fue que pude trabajar directamente con los productos.
En este período, he trabajado con el software de Rockwell Automation y he aprendido a programarlo, además de formarme con dispositivos reales. De ese modo, he podido adquirir las herramientas necesarias para entender las complejidades de los productos y explicárselas a los clientes. También he tenido la oportunidad de visitar a los clientes con otros administradores de cuentas con mayor experiencia.
Si estás pensando en presentarte al programa, te animo de todo corazón a que lo hagas. Trabajarás con gente de todo el mundo de gran dedicación y no solo conseguirás impulsar tu carrera, sino que también harás amigos para toda la vida.
Pero para que saques el máximo partido al programa, tengo algunos consejos:
- Ten la mente abierta. Conocerás gente de diferentes culturas y trabajarás con compañeros con diferentes estilos y estrategias de trabajo.
- Conoce gente y... ¡pregunta, pregunta y pregunta! Habrá muchos profesionales con gran experiencia encantados de ayudarte. ¡No seas orgulloso y pide ayuda!
- Durante la formación en Bruselas, no pierdas de vista que te encontrarás en la sede central para EMEA. Y, aunque no conozcas a tus compañeros de la cafetería, podrían ser directivos importantes de la empresa —el director o el vicepresidente— así que aprovecha la oportunidad de darte a conocer.