La implementación del sistema, que se llevó a cabo en tres fases, comenzó en junio de 2018 y terminó en abril de este año. Mientras KC actualizó mecánicamente la línea con un proceso añadido, Rockwell Automation ayudó al cliente a completar la migración del proyecto a PowerFlex 755, integrar el control y llegar al final de la puesta en marcha a tiempo en cada fase.
En ese sentido, la división SSB de Rockwell Automation tuvo que entregar una especificación funcional del proyecto, la arquitectura del sistema y los arreglos en el plan de diseño del CCM. A esto se sumó también el trabajo en la puesta en marcha de los variadores de velocidad PowerFlex 755 e integrar la actualización del sistema de control que KC hizo con el nuevo sistema GuardLogix.
“Hoy en día, la nueva plataforma nos otorga mayor versatilidad y mejores niveles de comunicación remota, es decir, actualmente podemos obtener datos que antes no era posible tener de los drives”, explica Varela. “Con la plataforma Ethernet podemos acceder a data links (nivel de enlace de datos) que pueden ser desplegados en pantallas HMI y así monitorear variables en tiempo real que pueden resultar críticas para el proceso”, añade el ingeniero.
A juicio del Superintendente de Sistemas Electrónicos, una de las principales ventajas que ofrece el PowerFlex 755 es que, a diferencia de otros controladores, “cuenta con módulos que comparten diferentes frames, lo que permite que disminuya el refaccionamiento requerido”; además, indica, el hecho de contar con tarjetas modulares ayuda mucho a lograr mayor versatilidad.
Varela asegura que, con esta nueva plataforma, más moderna y segura, la empresa puede sentirse más tranquila respecto a la operación de su maquinaria, evitando con ello posibles fallas o problemas inesperados. “Por más que uno cuide el equipo y trate de mantenerlo de la mejor forma posible, nunca resulta igual que contar con una aplicación que se encuentra en óptimas condiciones”, destaca.